Evangelio del Domingo, 25/06/2017(Mt.10, 26-33)

Antoni BigCuore *

Evangelio según Mateo, 10, 26-33


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: "No tengáis miedo de los hombres, pues nada hay de encubierto que no sea revelado, y nada hay de escondido que no sea conocido. Lo que os digo en la oscuridad, decidle a la luz del día; Lo que escucháis al pie del oído, proclamadlo sobre los tejados. ¡No tengáis miedo de aquellos que matan el cuerpo, pero no pueden matar al alma!

Por el contrario, temed al que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno! ¿No se venden dos pardales por algunas monedas? Sin embargo, ninguno de ellos cae al suelo sin el consentimiento de vuestro Padre. En cuanto a vosotros, hasta los cabellos de su cabeza están contados. ¡No tengáis miedo! Vos vale más que muchos gorriones.

Por lo tanto, todo aquel que se declare a mi favor ante los hombres, también yo me declarar a favor de él delante de mi Padre que está en los cielos. Pero él me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos. (1)

REFLEXIÓN A. BIGCUORE: Poco antes de los versículos 26ª 33, en el mismo capítulo, Jesús da sus consejos a los Discípulos, diciéndoles para ellos "ir primero a las ovejas perdidas de Israel".
El Maestro les recomienda también: "no tengáis miedo de aquellos que matan el cuerpo, pero no pueden matar al alma".

Todo aquel de decidirse por Jesús y su evangelio, debe ser consciente de que va a sufrir persecuciones, incomprensiones, calumnias, etc., pues el discípulo no es mayor que el Maestro. Me persiguieron a mí perseguidos también a ustedes.

¡Pero el AMOR VENCE EL MIEDO! Por eso, que los cristianos no debemos tener miedo de anunciar a Jesús, pues la recompensa que viene de esa actitud, es mucho mayor que cualquier tipo de miedo.

Como dice el gran teólogo PE.Bertolini, "los discípulos no deben tener miedo, porque la misión se basa en la verdad, que pone al descubierto toda mentira de un sistema social que no muestra la verdadera cara". (2)
Los idólatras pueden incluso matar el cuerpo de los Discípulos (y también nosotros cristianos de hoy), pero JAMÁS pueden matar al Alma, pues ésta pertenece a Dios y, solamente Él, es capaz de retomarla.
Mis Hermanos y mis Hermanas en Cristo, no tengamos miedo de anunciar a Jesús al mundo y de dar nuestro testimonio en el medio social en que nos encontramos. En el tiempo adecuado, cosecharemos salud, paz, alegría en nuestros corazones.
Que descienda sobre ti toda tu familia, la bendición del Dios todo amoroso y rico en misericordia, que es el Padre + el Hijo + y el Espíritu Santo. ¡Amén!

(1) Fuente: Portal de la Nueva Canción - (2) Biblia Pauline, pg.1.251.
(*) Autor es escritor y comunicador del evangelio de Jesucristo para todo el planeta. Conozca y divulgue su Blog Bien Vivir Brasil - antonibigcuore.blogspot.com (autoconocimiento, espiritualidad y vida sana)